Aprender a dar solo lo que uno quiere dar sin esperar es una habilidad que se debe practicar. Si tú eres de las personas que lo han practicado, tienes más probabilidades de localizar y mantener a tu pareja. Sigue leyendo
Practica tu forma de respirar para conseguir una respiración conveniente que, al tiempo que te aporte el oxígeno que necesitas para vivir y funcionar corporalmente de una manera adecuada, te deje relajarte o experimentar una sensación de calma que te distancie de todo estado de agobio., Sigue leyendo
No es extraño entonces que la mínima vaguedad sea susceptible de desestabilizarles y generar inesperados y también imponentes oleajes emocionales en sus relaciones. Ataques de celos, saña, paranoia son invitados habituales. Sigue leyendo
El masaje se empieza con una diagnosis del hara, centro energético del bajo vientre, donde el practicante observa el estado kyo o bien jitsu de los meridianos y decide el tratamiento a continuar. Según se desarrolle el trabajo puede, incluso, optar por tratar otras zonas que perciba con mayor necesidad. Sigue leyendo
Oh el blog mío, gritó Laura, para, por favor, oh para, no más. No puedo aguantarlo. Laura nunca había sentido un dolor como ese ya antes. Maldijo tiró su cuerpo y luchó para eludir otro mas no pudo moverse. Sigue leyendo
Le explico lo de la similitud de las películas de Jennifer Lopez y de su vida con Álvaro, cuya paz queda interrumpida por sus ataques de gilipollez cual pausa publicitaria. Me siento una mala amiga, pero hago un esmero para serlo un poco más. Sigue leyendo
Soy una chica muy entregada y me chifla gozar al máximo en cama, conmigo experimentarás sensaciones únicas y muy placenteras. Sigue leyendo
El hombre se sienta en el borde de la cama con los pies en el suelo. Su compañero se posiciona en su regazo, frente a él. No hay escasez de contacto visual sensual cuando ella cierra sus piernas alrededor de su cintura y, utilizando su muslo para apalancarse, lenta y tentadora se frota contra su pene. Sigue leyendo
Dejándolo ahí, regresa al primer sumiso, a proseguir con la faena que ya había comenzado. Hay que retomar los chillidos de mando. Hay que devolver al primer sumiso, que habrá recuperado su aliento, al punto de excitación en el que se le había dejado. Sigue leyendo
Se separó de ella y se apoyó en el banco. Ponte las bragas de rodillas. No permitas que se caigan o deberé darte unos azotes. No desearás que la gente oiga a su jefe y a su terapeuta ser azotados, ¿cierto?? Sigue leyendo
